DIY: huevos de Dino

¡¡Buenísimos días!!

Tras un finde  -más que-  fantástico, en el que hemos disfrutado muchísimo y sobretodo de nosotros, festejando nuestra primera verbena que ha sido de lo más divertida con rúa y feria incluida  -¡gracias amor, eres el mejor! ^^-  así como de soleado día de playa en la mejor compañía, no podemos estar más encantados con nuestro pedazo de finde juntitos =).

Hoy traemos uno de nuestros 'experimentos' caseros, de ésos que tanto nos gustan, entretenidos, divertidos, fáciles y con coste  -casi-  cero. ¿Qué más se puede pedir?

Con unos sencillos pasos preparamos unos huevos de Dino de lo más molones!

Uno de nuestros huevos de Dino 

Con unos simples globos y pequeños muñecos que todo hijo de vecino tiene seguro por casa tenemos suficiente para preparar nuestro juego educativo en casa.

Vale cualquier tipo de muñeco o figura, nosotros en ésta ocasión y para éste experimento hemos escogido mini dinosaurios pequeñitos que le dan más realismo al juego, pero como decimos cualquier figura serviría.

Bastará con coger los globos e introducir en ellos la figurita, y una vez dentro, llenarlos de agua, el tamaño es al gusto, pueden ser más pequeños o un poco más grandes como los hacemos nosotros, como los nuestros son de dinosaurios los llenamos un poquito más y así tenemos más ratito de juego después con mi amorcito ^^. Una vez llenos de agua los anudamos y los introduciremos en el congelador. En un par de horas los tendremos congelados, lo que solemos hacer nosotros es preparar varios y así tenemos para diferentes días ya preparados, mi cachorrito bebé los pide cuando le apetece jugar a huevos de dino y así siempre tenemos alguno listo para descubrir!

Más sencillo, imposible.

Sacamos el huevo de dino del congelador,

¡qué frío está mami!

Ahora simplemente hemos de romper el globo para descubrir un fantástico huevo de hielo que esconde a nuestro dinosaurio bebé! Tal como se aprecia en la imagen de cabecera.

Utilizaremos un pequeño bol o recipiente para poder ponerlo en su interior, y así observar como poco a poco vamos descubriendo lo que esconde en su interior.

Apenas dejamos nuestro huevo en el bol,

es mucho más diver ir jugando con él!

A mi amorcito le encanta ir tocándolo a pesar de lo 

frío que está, le va dando vueltas y jugueteando con él

También le añadimos un poquito de agua en el bol para que de ese modo, ayudar a deshacer nuestro huevo de hielo, lo que a los peques también les gusta mucho pues van jugando con el agua mientras se va viendo el dinosaurio dentro.

Así, con un poquito de agua vamos jugando

mientras esperamos que el dino bebé salga de su huevo ;)

Poco a poco, con o sin ayuda adicional del agua  -que vertemos juntitos encima del huevo, que le encanta a mi cachito-, vamos observando como el dino se abre paso desde su interior.

Mientras mi amor juega con el huevo en el agua,

 ¡ahí asoma nuestro dino!

En unos minutos de juego con el agua, vaciamos nuestro bol y dejamos el huevo "libre", tocándolo todo el tiempo, sacándolo del bol y divirtiéndonos con lo frío que está! En cuanto empieza a salir el dino es muy divertido ver la emoción de mi amorcito, entonces va toqueteando el muñeco impaciente porque se libere del huevo!

Le hace una gracia tocarlo cuando va

apareciendo del huevo 

Ya casi está fuera completamente y mi cachorrito está ya deseando cogerlo  -ya no lo suelta en toda la tarde jajaja-.

Apenas lo deja en el bol, es tan divertido tocarlo,

moverlo, cogerlo y comprobar lo frío que está!

Después nos salpicamos del agua que

nos queda en las heladas manitas

A veces ocurre que al llenar los globos y congelarlos, dependiendo cómo, se quedan más en un lado que en el centro, pero es igual de divertido y les encanta!

Un poquitín más y tenemos a nuestro bebé dino!

Cuando por fin sale del huevo y tenemos a nuestro dino nos ponemos muy contentos, pues le hemos visto "nacer" del huevo!! 

Mi amorcito enseña su bebé dino

Es un facilísimo juego para hacer en casa y salir un poco de 'lo común', así como educativo, pues nos sirve para aprender jugando, algo que es realmente importante, sobretodo para con los más peques, además de ser un sencillo y divertido juego sensorial.

Podemos aprovechar éstos experimentos para explicarles al mismo tiempo que les enseñamos jugando mientras ellos mismos comprueban cómo sale del huevo, que hay animales que nacen de un huevo de su mamá. Como por ejemplo los dinosaurios, al igual que de los huevos de las gallinas a veces nacen pollitos. 

Es entonces cuando mi amor se va a la cocina, me señala los huevos y me dice que lo cojamos para ver nacer pollitos! Jajajajajaja, es que te como enterito mi cachorrito!!!!!

Es alucinante lo que sabes mi amor, me dejas con la boca abierta y no puedo más que reírme a carcajadas contigo, con tus salidas y tu ingenio, es realmente asombroso lo que llegan a saber y la infinidad de cosas que me enseñas día a día.

Pues nada, un día mami te sorprenderá y traeremos un huevo con pollito a punto de nacer para que lo veas  -¿qué haremos después con el pollito?, será la pregunta del millón, porque conociendo a mi amor, querrá quedárselo!

Ya tuvimos ocasión de verlos en el Museo de las Ciencias Príncipe Felipe en nuestra visita a València, y a pesar de que no los vimos 'nacer', algunos todavía sí estaban dentro de su huevito roto, en el cascarón y te encantaron mi amor!

Hasta aquí nuestro experimento huevos de Dino, todavía nos queda uno en el congelador y mi cachorrito se acuerda casi cada día  -estaríamos todos los días viendo salir bebés de dino de nuestros huevos jajaja-, pero tenemos muchos experimentos que hacer, descubrir y disfrutar!

En próximos post, hablaremos de las bolsitas sensoriales que preparamos en casa juntitos. Si es que todo lo que sea inventos, guarrear e inventar, ¡nos encanta! Verdad, ¿mi amor?

Muy feliz semana, a disfrutar!!!!

Contentos con nuestros experimentos y disfrutando éste año al máximo del veranito juntitos, Cachito&Mami..*